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Monday, August 12, 2019

Os alforjes de San Miguel, Cajamarca, artesanato para cuidar do meio ambiente.


Os alforjes de San Miguel, Cajamarca, artesanato para cuidar do meio ambiente. Menos plástico no mar.




Os mares são seriamente afetados pela contaminação crescente e cumulativa com o plástico, que, como o lixo, se acumula formando enormes ilhas artificiais flutuantes, cujo processo de decomposição pode durar centenas de anos. Os plásticos, em muitas formas (garrafas, sacos, brinquedos, ferramentas, suportes de vários produtos) são descartáveis ​​e, como não são reciclados ou tratados adequadamente, inevitavelmente atingem os mares. A cada segundo, mais de 200 quilos de plástico são jogados em mares e oceanos; 70% vai para o leito do mar e 15% para flutuar. Todos os anos, 8 milhões de toneladas de plástico são despejadas no mar; Estima-se que em 2050 haverá, no peso total, mais plástico que peixe





No Peru, ano 2018, devido à má gestão de resíduos ou lixo, apenas 0,3% das sacas, garrafas, sorvetes, tecnopor e outros plásticos coletados pelos municípios são recuperados; 43,7% acabam em lixões, rios e finalmente nos mares. Das 950 mil toneladas de plástico compradas a cada ano, 74,8% se tornam lixo coletado pelos trabalhadores municipais. 56% destes resíduos são transferidos para um aterro (local formal de armazenamento do lixo); Apenas 0,3% do total é reciclado. Os restantes 43,7%, equivalentes a 309 mil toneladas, terminam em campos abertos ou lixões a céu aberto, são queimados ou jogados nos rios, para terminar no mar.

O que acontece nas aldeias longe da costa, nas terras altas e terras altas do território peruano? Qual o destino final dos vários objetos de plástico jogados nas estradas rurais? Eles só têm impacto local? Não, porque com as chuvas, os ventos, os plásticos são arrastados lentamente para os rios, depois para os mares, num processo inevitável e imparável.




A educação cívica e a formação da consciência ecológica são necessárias para resolver o problema da poluição e minimizar seus efeitos. Em San Miguel, na província de Cajamarca, e em outras províncias, existe um costume ancestral de usar alforjes coloridos para transportar compras no mercado e outros bens.


O que é um alforje?

 O alforje é o tradicional saco de tecido com linhas coloridas e desenhos originais usados ​​nas aldeias e áreas rurais da região de Cajamarca; O alforje é uma amostra de nossa cultura e coerência com o slogan de cuidar do meio ambiente.





O alforje é uma parte inseparável do vestuário da população rural; como é o portfólio de mulheres nas cidades. Os conterrâneos os levam para fazer compras ou atividades diárias, em reuniões amigáveis ​​para discutir os acontecimentos do dia, em reuniões de família, em eventos públicos; sempre com seus inseparáveis ​​alforjes.





Os alforjes, versáteis e coloridos, são adequados para mulheres e homens, podem ser transportados em todos os momentos e circunstâncias; sempre presente, assim como chapéus, enfeites que nunca estarão ausentes do camarim.






Você carregaria um alforje para fazer suas compras?

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Las alforjas de San Miguel, Cajamarca, artesanía para cuidar el medio ambiente.


Las alforjas de San Miguel, Cajamarca, artesanía para cuidar el medio ambiente. Menos plástico en el mar.






Los mares están afectados seriamente por la contaminación creciente y acumulativa con plástico, que como basura, se acumula formando enormes islas artificiales flotantes, cuyo proceso de descomposición puede durar cientos de años. Los plásticos, en muchas formas (botellas, bolsas, juguetes, herramientas, soportes de diversos productos) son descartables y como no se reciclan ni tratan adecuadamente, llegan inevitablemente a los mares. Cada segundo se arroja más de 200 kilos de plástico a mares y océanos; el 70% se va al fondo marino y el 15% se queda flotando. Cada año se vierten 8 millones toneladas de plástico en el mar; se estima que para el 2050 habrá, en peso total, más plástico que peces





En el Perú, año 2018, por la mala gestión de residuos o basura, solo el 0,3% de las bolsas, botellas, sorbetes, tecnopor y demás plásticos que recogen las municipalidades es recuperado; el 43,7% termina en un botadero, los ríos y finalmente en los mares. De las 950 mil toneladas de plástico compradas cada año, 74,8% se convierte en basura que es recogida por los trabajadores municipales la recogen. El 56% de dichos residuos es trasladado a un relleno sanitario (lugar formal de almacenamiento de la basura); solo el 0,3% del total es reciclado. El 43,7% restante, equivalente a 309 mil toneladas, termina en descampados o botaderos a cielo abierto, es quemado o arrojado a los ríos, para terminar en el mar.



¿Qué pasa en pueblos alejados de la costa, en la sierra y partes altas del territorio peruano? ¿Qué destino final tienen los diversos objetos de plástico arrojados en los caminos rurales? ¿Sólo tienen impacto local? No, porque con las lluvias, los vientos, los plásticos son arrastrados lentamente hacia los ríos, luego a los mares en un proceso inevitable e imparable.



La educación cívica y la formación de la conciencia ecológica son necesarias para enfrentar el problema de la contaminación y minimizar sus efectos. En San Miguel, provincia de Cajamarca, y en otras provincias, existe la costumbre ancestral de usar vistosas alforjas para llevar las compras del mercado y otros bienes.


¿Qué es una alforja?

 La alforja es la tradicional bolsa tejida con hilos de colores y originales diseños se usa en los pueblos y zonas rurales de la región Cajamarca; la alforja es una muestra de nuestra cultura y de la coherencia con la consigna de cuidar el medio ambiente.





La alforja es parte inseparable de la indumentaria de la población rural; como lo es la cartera de las mujeres en las ciudades. Las paisanas las llevan para realizar las compras o actividades cotidianas, en reuniones amistosas para comentar los sucesos del día, en reuniones familiares, en eventos públicos; siempre con sus inseparables alforjas.





Las alforjas, versátiles y vistosas, son aptas para mujeres y hombres, se pueden llevar en todo momento y circunstancias; siempre presentes, lo mismo que los sombreros, objetos de adorno que nunca estará ausente del vestuario.





¿Llevaría usted una alforja para hacer sus compras?


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